Estado Larval

A él nunca le agradó ser el mejor. Las felicitaciones, los aplausos, las palmadas en la espalda, esas extrañas muestras de admiración siempre le resultaron incómodas e insoportables.

Él quería ser simple, él envidiaba a los débiles, a los tontos.

Siempre fue el mejor, sin hacer mucho esfuerzo. Y no solo en un solo sentido: era el mejor en las clases, el que más destacaba en los deportes, el más talentoso en las artes. Eso sí, nunca tuvo muchos amigos, siempre estuvo solo.

- El sentido de pertenencia se desarrolla cuando uno es pequeño, cuando tiene un grupo de amigos con los que pasa mucho tiempo. Yo nunca tuve ese grupo de amigos.

El Candelabro Guía

Decidí que era hora de cambiar de hábitos.

Que ya no me iba a quedar en casa todo el tiempo.

Siempre me dijeron que los caminos del campo son hermosos de noche. Que las estrellas se pueden ver con mucha más nitidez que en la ciudad, que incluso puedes ver estrellas que usualmente no ves debido al smog de la gran urbe. Y que la luna es tan brillante que puede iluminar el camino que tomes, haciendo innecesarias a las linternas y lámparas.

Espejos

- Llevas un buen rato yendo de un lado para otro dentro de esta casa, ¿qué sucede? ¿Perdiste algo?
- No, solamente busco un espejo.
- No lo vas a encontrar. No tengo espejos en mi casa.


Me paré en seco. Estoy visitando a mi tío luego de unas semanas del entierro de su hija menor, Anestesia, gracias a que mi madre me mandó a dejarle un recado. Ya es hora de irme, prometí encontrarme con mis amigos, pero antes de salir a la calle necesito de un espejo para arreglarme.

Anestesia - Esperanza

Mi tío David siempre fue uno de esos hombres enigmáticos y caprichosos, el incomprendido de la familia, el que se quedaba sentado a un lado en las reuniones familiares. Su casa asemejaba un laberinto de habitaciones, la mayoría de ellas vacías o con un mueble. Casi no recibía visitas debido a su extraña forma de ser y a lo surrealista de su hogar.

Se casó con una mujer casi tan extraña que él, que falleció mientras daba a luz a su segunda hija.

Su hija mayor se llamaba Esperanza, y la menor, Anestesia.